En el mundo de la conectividad y la comunicación en línea, las direcciones IP (Internet Protocol) juegan un papel fundamental. Cada dispositivo que se conecta a Internet tiene asignada una dirección IP única, que permite identificarlo y establecer comunicaciones con otros dispositivos. Sin embargo, existen dos tipos de direcciones IP: públicas y privadas. En este artículo, exploraremos las diferencias entre ellas y cómo se utilizan.

¿Qué es una IP pública?

Una IP pública es una dirección IP que se asigna a un dispositivo o un servidor para que pueda ser accesible desde Internet. Estas direcciones IP son únicas y se asignan de forma centralizada por la Autoridad de Números Asignados de Internet (ICANN). Las IP públicas se utilizan para que los dispositivos puedan comunicarse entre sí y con servidores remotos, lo que permite la transferencia de datos y la navegación en Internet.

Características de las IP públicas

  • Únicas y asignadas de forma centralizada
  • Accesibles desde Internet
  • Se utilizan para la comunicación entre dispositivos y servidores remotos
  • Necesarias para la navegación en Internet y la transferencia de datos

¿Qué es una IP privada?

Una IP privada es una dirección IP que se asigna a un dispositivo dentro de una red local, como una red doméstica o una red empresarial. Estas direcciones IP no son únicas y no se asignan de forma centralizada, lo que significa que pueden ser duplicadas en diferentes redes. Las IP privadas se utilizan para la comunicación entre dispositivos dentro de la misma red local.

Características de las IP privadas

  • No son únicas y pueden ser duplicadas en diferentes redes
  • No son accesibles desde Internet
  • Se utilizan para la comunicación entre dispositivos dentro de la misma red local
  • No son necesarias para la navegación en Internet

Uso de las IP públicas y privadas

En la mayoría de los casos, los dispositivos utilizan una IP privada dentro de la red local y una IP pública para acceder a Internet. El dispositivo envía solicitudes a un servidor de acceso (por ejemplo, un enrutador) que actúa como intermediario entre la red local y Internet. El servidor de acceso utiliza una IP pública para comunicarse con servidores remotos y devuelve la información solicitada al dispositivo que la requirió.